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Hoy cambio y dejo un poco de lado la tecnología. Los que seguís este blog ya sabréis que la tecnología la encuentro útil si nos ayuda a mejorar metodologías en el aula y organización de centro. Y hoy hablaré justamente de metodología en el aula.
Es época de preinscripciones y, como padre que soy, he ido a diferentes puertas abiertas de diferentes institutos. El trabajo por proyectos parece que está de moda y prácticamente todos los centros que he visitado hacían bandera de él de un modo u otro. Ya lo encuentro positivo, aunque me resulta un tanto sorprendente la facilidad con que se vende. Hace años que trabajo por proyectos y encuentro difícil hacer buenos proyectos. Pero no es este el tema que quiero exponer.
Resulta que se vislumbra una dualidad entre trabajo por proyectos y trabajos memorísticos. Parece que uno excluya al otro. Es más aún, parece como si el trabajo memorístico haya perdido simpatía y ahora sea el enemigo a vencer. Un ejemplo concreto. En uno de los centros, una persona de los que asistíamos a la charla como público hizo la siguiente pregunta: «a partir de ahora ya no se podrá jugar al Trivial?» (refiriéndose a que los alumnos no sabrían las respuestas). Otro asistente añadió: «¿los alumnos no deberán aprenderse la lista de los verbos irregulares?».
Sinceramente esperaba que desmintieran ambas preguntas, pero no fue así. La respuesta que se les dio fue que en ese centro se priorizan otros aspectos del aprendizaje que eran más importantes que los aprendizajes memorísticos. ¡Se intentaba que los alumnos fueran competentes!
Soy un firme defensor del trabajo por proyectos pero, ¿se puede ser competente en lengua inglesa sin saber verbos irregulares? No lo entendí.
Ejemplo puntual aparte, es una tendencia que veo y que, sinceramente no comparto. Ciertamente, el aprendizaje no puede ser únicamente memorístico. ¡Claro! Y también es cierto que hay que ser muy cuidadoso con qué cosas se pide que los alumnos aprendan de memoria. ¡Claro! Pero de ahí a plantear que no hay que aprender nada de memoria hay un gran salto.
A veces, la cosa se mezcla más hablando de exámenes. Somos muchos (y me incluyo) que no hacemos exámenes memorísticos a los alumnos. Concretamente, no hago NINGÚN examen memorístico a mis alumnos. ¿Eso quiere decir que considero que la memoria no es importante? ¡De ninguna manera! Es un aspecto que evalúo, pero utilizo otras maneras que no son el examen.
Por ejemplo, cuando los alumnos hacen una exposición oral (una presentación), es necesario que ésta sea de memoria. Preparan un tema o una experiencia y la acaban presentando ante sus compañeros (o de las familias). Tienen claro cómo se hace una buena exposición oral (qué hay que hacer para ser competente) y deben aprender conceptos de memoria. No es necesario que hagan de loros, pero hay conceptos que deberán entender, aplicar y, finalmente, explicar de memoria.
Yendo a un ejemplo que no es de mi especialidad. ¿Es necesario que los alumnos conozcan la fecha de la guerra civil española y sus causas? A mí me parece muy evidente que sí. ¿Como entenderán el mundo en que vivimos si no saben de dónde venimos? Ahora bien, ¿esto quiere decir que les tenemos que hacer una clase expositiva (con o sin libro de texto), ponerles deberes para que respondan preguntas y finalmente hacerles un examen para que demuestren que se lo saben (y quizás no lo han entendido)? ¡No!
Podríamos buscar otras estrategias para acompañarlos en este aprendizaje memorístico. Quizás pueden ver algunos vídeos informativos, investigar y terminar preparando una pequeña obra de teatro basada en el inicio de la guerra. Seguro que en el proceso de preparación, sin tener que hincar los codos, muchos aspectos importantes ya los habrán memorizado.
Para mí, la memoria sigue siendo un factor clave para el aprendizaje. Sin memoria no se puede ser competente. Y, cuando trabajamos por proyectos, podemos tender a olvidarlo. No queremos alumnos loros. Queremos alumnos que comprendan los conceptos. Pero también queremos alumnos que recuerden estos conceptos que han aprendido y comprendido. Sólo así podrán relacionarlos con los nuevos que vayan aprendiendo.
